No tengas miedo, no; desde aquí te quiero ayudar a prepararte para ser mamá de la mejor manera posible, de forma saludable, a entrenar después del parto durante la cuarentena y a optimizar tu recuperación.
Sin prisa pero sin pausa, con los ejercicios más adecuados para que, en el tiempo justo y necesarios, vuelvas a estar como antes del parto.
Las seis primeras semanas después de dar a luz son superimportantes para tu recuperación total, por eso vas a necesitar tiempo para ti misma, un ratito aunque sea mientras el bebé duerme, para realizar tus ejercicios de Kegel, a fin de reforzar los músculos de tu suelo pélvico.

Esto es imprescindible, según descubrió el sexólogo Arnold Kegel allá por 1940, para zafarse de la incontinencia urinaria más allá del postparto, durante la menopausia.
Si quieres evitar el atrofiamiento de las paredes de la uretra y de la vejiga, empieza a hacer sus sencillos ejercicios durante el embarazo y continúa en el postparto.
¿Por qué te cuento todo esto?
Porque yo he vivido mi propia experiencia personal como embarazada y creo que os puede servir a todas las demás mamás para que todo el proceso de gestación y recuperación os vaya igual de bien.
Después de dar a luz, me dejé aconsejar por mi ginecóloga. Ella fue quien hizo la valoración posparto y la que me dio el alta para poder volver a entrenar una vez pasada la cuarentena.
Además, junto con el apoyo de un fisioterapeuta, se descartaron, principalmente, problemas en suelo pélvico, pérdidas de orina y diástasis abdominal (que es la separación de los músculos del abdomen).
Estaba todo perfecto gracias a mi actividad física durante el embarazo, pero, sobre todo, por haber empezado el embarazo en forma.

Así que, si estás pensando en quedarte embarazada y no realizas ejercicio físico de forma habitual, te animo a que inicies un proceso de «puesta en marcha» con un entrenador para que tu embarazo sea más llevadero.
La recuperación durante el postparto
Así pues, con el consentimiento de ambos profesionales, a la semana, empecé a realizar ejercicios de forma suave y coherente en casa, hasta finalizar la cuarentena. La rutina de entrenamiento que realicé durante ese periodo tuvo como objetivos:
• Recuperar el suelo pélvico.
• Recuperar mi composición corporal de antes de quedarme embarazada: perder la poquita grasa que había ganado y tonificarme nuevamente.
• Reeducar la respiración para fortalecer el core.
• Fortalecer el core para recuperar diástasis.
Con la finalidad de conseguir esos objetivos, lo que hice, en primer lugar y más importante, fue alimentarme mucho mejor, puesto que estaba lactando. Y, en segundo lugar, como actividad física:
• Caminatas diarias, aumentando progresivamente cada semana la duración e intensidad de las mismas, pero sin llegar nunca a correr.
• Ninguna actividad de impactos o saltos.
• Nada de abdominales “típicos”.
• Ejercicios de Kegel para tonificar suelo pélvico.
• Para el core, hipopresivos.
• Ejercicios de tonificación para el tren superior: hombros, brazos y espalda principalmente, con pesas de entre 2-4 kg, sentada y controlando siempre postura corporal.

Después de la recuperación
Pasadas las seis-ocho semanas de cuarentena, me volví a incorporar al gimnasio y reinicié el entrenamiento, de forma controlada y progresiva. Desde luego, influye mucho dar a luz estando en forma.
Por eso, siempre aconsejo a todas las mujeres que quieren ser madres estar un mínimo en forma antes de quedarse embarazadas, para que el embarazo sea mucho más llevadero, así como la recuperación posparto.
Y, sobre todo, mi consejo es: no tengas prisa ni agobio por volver a estar en forma rápidamente, porque el agobio y el estrés pueden interferir negativamente en la lactancia, pudiendo hasta perder la leche materna.
Aprovecha a estar con tu bebé
Ten en cuenta que esa etapa de crecimiento y apego con tu bebé no volverá nunca. por lo que aprovecha para pasar tiempo con él o ella y disfruta este nuevo aprendizaje; y no pongas en riesgo tu salud física: suelo pélvico, diastasis…

En definitiva, tómate tu tiempo, empieza progresivamente suavecito y escucha a tu cuerpo para ir notando cuándo empieza a estar preparado para más intensidad. Y, si puedes, (cuando tu fisio/rehabilitador te dé el ok), ponte en manos de una profesional del deporte que haya pasado por un embarazo para que empatice contigo y tus sensaciones y no des ningún paso en falso.
Si quieres saber cuáles son esos ejercicios para el postparto que te devolverán al estado físico previo al embarazo, sígueme en Instagram para más consejos o contáctame directamente en martha@marthafit.com para que empecemos a trabajar juntas ¡YA!
Tener más de 10 años de experiencia en el mundo del fitness, además de mi compromiso por llevar un estilo de vida basado en la alimentación sana y equilibrada y la práctica del deporte.
Todo esto es lo que me ha ayudado a conseguir el cambio físico, sí, pero, sobre todo, el cambio mental y espiritual que siempre había buscado. Recuerda siempre:
Todo logro empieza con la decisión de intentarlo.